lunes, 26 de septiembre de 2016

De los tales: Solo uno agradeció

De los tales: Solo uno agradeció: En Lucas 17:11-19 encontramos a Jesús sanando a 10 hombres que tenían lepra. Solo uno de ellos volvió agradecido. Es una hermosa lección par...

viernes, 23 de septiembre de 2016

El sermón o mensaje bíblico y tipos de sermones y partes de un mensaje.


El sermón o mensaje bíblico ,
 tipos y partes de un mensaje.


Te has estado haciendo la pregunta de cómo podrías lo que es verdaderamente un mensaje bíblico?  Si esa es tu respuesta espero que al leer este artículo, tus dudas se hayan aclarado.


El sermón o mensaje bíblico ,como vimos en la guía pasada Como elaborar un estudio biblico, el sermón es una palabra dada por Dios para una o más personas que anunciamos en obediencia al Señor , otros autores dicen:
 La predicación cristiana es, ante todo, la presentación del evangelio en fidelidad a las escrituras. De este modo, podemos concluir que todo sermón debe ser "bíblico", en mayor o menor grado- Drpablojimenez.
El mensaje sale del texto bíblico,  cita : Francisco Schmidt


Tipos de sermones:


1. El sermón textual: Este tipo de sermón comenta frase por frase uno o dos versículos de la Biblia. De este modo, obtiene del texto tanto su tema como las divisiones de su desarrollo . Un ejemplo de este tipo de sermón sería una presentación de tres puntos basada en Juan 3:16.
a. El motivo de la Salvación: "De tal manera amó Dios al mundo..."
b. El mediador de la Salvación: "...que ha dado a su hijo unigénito..."
c. El propósito de la Salvación: "...para que todo aquel que en él cree no se pierda más tenga vida eterna."
Este tipo de sermón es bastante práctico y bíblico pues contiene preguntas que son respondidas precisamente por la misma palabra de Dios.


2. El sermón expositivo: 
Es la forma más antigua y popular de predicar todo el que se dedica a predicar debe dominar este arte. Este sermón es el que, fundamentado en una unidad de la Biblia, presenta un aspecto del mensaje del texto. La extensión del pasaje bíblico no es lo importante en este caso; lo importante es que el sermón presente algunos de los muchos temas relevantes que sugiere el texto. Por ejemplo, la parábola del Buen Samaritano (Lc. 10:25-37) sugiere una larga lista de temas: el significado de ser prójimo, la responsabilidad social de la iglesia, el peligro del legalismo religioso, el amor de Dios por el marginado, etc. Un sermón expositivo sobre esta parábola presentaría sólo uno de estos temas, dejando los demás para futuros sermones.
Aquí el inconveniente es que si no se sabe manejar podría caerse en el error de divagar y hasta salirse del tema.

3. El sermón narrativo: En este tipo de sermón el predicador cuenta una historia bíblica. Al hacerlo, la historia cobra vida ante nuestros ojos y el mensaje del texto se vuelve evidente. En realidad, es un estilo de predicación muy sencillo. Se presta, en particular, para sermones evangelísticos y para predicarle a los niños. Tomemos, por ejemplo, el relato de la curación del leproso en Marcos 1:40-45. Un buen sermón narrativo de propósito evangelístico nos hará comprender tanto el sufrimiento del leproso como el amor de Jesús. Al oír la historia nos involucramos en la misma y de pronto comprendemos que el leproso nos representa. Nosotros estamos tan necesitados como él. Sólo Jesús puede tocarnos, dejarnos limpios y restaurarnos a una vida plena.

4. La predicación temática
La predicación temática parte de un asunto de interés general, una doctrina o un episodio de la historia de la Iglesia. Entonces, hace una reflexión sobre el tema a la luz del mensaje de la Biblia y del pensamiento cristiano. El propósito de este tipo de predicación es, principalmente, didáctico; busca que la congregación aprenda más sobre el tema, tome conciencia de la importancia del mismo y actúe a base del conocimiento adquirido. Podemos identificar dos (2) variantes básicas del sermón temático:

a. El sermón doctrinal: Este tipo de sermón presenta algún aspecto importante de una doctrina de la fe cristiana. Es decir, presenta un punto importante de la fe tal como la necesidad de salvación, las consecuencias del pecado o los frutos del Espíritu Santo. Como indicamos anteriormente, su propósito es, básicamente, didáctico.

b. El sermón sobre problemas sociales: El sermón sobre problemas sociales presenta una reflexión bíblica y teológica sobre un tema de actualidad que afecta a la comunidad de la cual formamos parte. Algunos temas relevantes en nuestro contexto serían el discrimen racial, la violencia doméstica o el militarismo. El enfoque básico de este tipo de sermón es teológico puesto que la Biblia dice muy poco sobre nuestros problemas actuales. Es decir, nuestra sociedad confronta problemas tales como el aborto y la contaminación ambiental que la Biblia no trata directamente. Este tipo de sermón entra en el área de la ética cristiana y, por lo tanto, su propósito oscila entre la didáctica y el desafío a la acción.

5. El sermon inductivo: En el sermón inductivo el predicador crea suspenso en la introducción al presentar la idea principal en forma de pregunta, sin revelar el complemento. El oyente se va enterando del complemento poco a poco a medida que se desarrolla el sermón. La introducción de nuestro mensaje prototipo (un sermón inductivo) termina con el sujeto en forma de pregunta (repetida tres veces usando diferentes palabras).

6. El sermon deductivo: El final de la introducción del sermón deductivo concluye con una presentación sencilla de la idea principal, tanto del sujeto como del complemento. Es decir, el predicador presenta una forma de «avance» que revela el sujeto y el complemento, de manera que el oyente recibe la idea o proposición principal del sermón antes de que comience la exposición.

Partes de un mensaje


LA INTRODUCCIÒN.-

La introducción debe estar marcada por:
·         La Brevedad
·         La Claridad
·         Interés para el auditorio

Se emplea para presentar el tema a los creyentes o para presentarse con los creyentes. No es un prólogo al sermón, es relacionarse con la congregación. La introducción tiende a despertar el interés con el fin de preparar los ánimos para escuchar el mensaje.

La introducción puede venir del texto mismo, como un apoyo histórico, puede venir del contexto para preparar el terreno de la prédica, puede ser buscado de la noticia del momento, en un suceso anterior personal, contado como anécdota, o en datos histórico-geográficos y utilizarlos con sutileza. La introducción y la conclusión son dos partes muy importantes del sermón.

A.    EL CUERPO  O DESARROLLO Y SUS DIVISIONES.-
En el sermón el cuerpo es la parte fundamental del mismo. En el cuerpo se encuentran las divisiones principales o temas secundarios, las subdivisiones o puntos que desarrollan las divisiones principales y las ilustraciones.
Las divisiones principales de un sermón sirven para ampliar o demostrar el tema a tratar. El predicador debe lograr que las divisiones sean claras y concisas tanto en su construcción como en su presentación, al igual que observar que la cantidad de subdivisiones que va a tener el sermón no sea exagerada y recuerde al oyente su mensaje.
Algunos textos de homilética recomiendan usar entre tres y cinco divisiones principales, aun cuando este concepto de libre utilización es criterio del predicador, su forma, su estilo y su manera de realizar los sermones.
El predicador debe recordar con claridad sus divisiones de manera que para hacerlo los haga notorios, los pondere  y los recuerde para que el oyente así los recuerde.
Por lo general el predicador sustentará con una o dos citas bíblicas cada punto principal, esto como una norma de orientación para el predicador, mas no como una regla a seguir.
Las subdivisiones sirven para explicar y ampliar cada punto principal, siendo recomendable entre dos y cinco subdivisiones de cada punto principal, ya que para que el oyente recuerde después tanto los puntos principales como las subdivisiones estas deben ser:
·         Cortas
·         Pocas en número
·         Similares en su estructura
Un método para lograr subdivisiones en los puntos principales consiste en tomar una palabra interrogativa:
¿Quién?
¿Qué?
¿Cómo?
¿Por qué?
¿Dónde?
¿Cuándo?
Y aplicar esta palabra al punto principal. De esta forma resulta una pregunta  que la subdivisión podrá responder.


B- LAS ILUSTRACIONES.-
Con ellas las verdades son ilustradas y explicadas. Una ilustración es una historia, un incidente, o un hecho con el cual se puede enseñar una verdad espiritual. Las ilustraciones en un sermón son similares a las ventanas de una casa, las cuales permiten la entrada de luz y dan claridad al mensaje que se está predicando.
Las ilustraciones deben:
·         Llamar la atención del oyente
·         Ser como la sal
·         Ser como clavos que se pegan en la mente
·         Afectar las emociones del oyente
·         Oxigenar la predicación
·         Ser el final del nudo
Las anécdotas deben ser usadas únicamente en los lugares apropiados y deben ser ellas mismas adecuada ilustración del argumento que se viene exponiendo. No hay nada peor en un sermón que una anécdota colocada forzadamente en algún lugar que no le corresponde. Si no se tiene ninguna anécdota bien adecuada e ilustrativa no se debe usar ninguna.
Es mil veces preferible un sermón con pocas o ninguna anécdota que un sermón repleto de ilustraciones que no encajan con el argumento.

Fuentes de las ilustraciones.-
·         El diario vivir
·         Los libros
·         Revistas
·         La palabra de Dios
·         Vivencias
·         La naturaleza
Requisitos de las ilustraciones.-
·         Deben ser dignas del mensaje
·         Deber ser adecuadas, no pasadas de tono
·         No deben apartarse de la verdad
·         Deben ser dignas del Evangelio
·         No deben ser solamente como relleno del sermón

C- LA CONCLUSIÓN DEL SERMÓN.-
Es retomar y hacer un resumen. En la conclusión llevamos al auditorio al punto decisivo, que es el objeto de todo sermón y lo que bien empieza, bien acaba, por lo menos con cierta probabilidad.
Por lo general debe ser corta y debe hablar al corazón del creyente y tocar sus sentimientos.
La conclusión no debe ser monótona. No hay nada que produzca peor efecto a los oyentes que ver que el predicador se inclina a leer las palabras finales del sermón. Es entonces cuando el corazón del predicador ha de desbordarse de tal modo que el auditorio sienta que no está leyendo unos pensamientos escritos en su oficina, sino, bajo el impulso del Espíritu Santo, tratando de hacer llegar la palabra a los corazones.


jueves, 15 de septiembre de 2016

Mi primera entrada



Hola, que Dios te bendiga mucho , esta es la primera entrada que redacto para el blog BIBLIATEKA, el cual significa para mi no que sea así, biblioteca de la biblia, el sentido de mi nueva propuesta es para hablarles de cosas super interesantes de la biblia que a veces pasamos por alto, mostrar de la manera mas normal, mis conocimientos y al fin realizar mi sueño de hacer un blog para la honra y la gloria de Dios pues al final a el le debemos todo.


Si por alguna razón Dios te ha guiado hasta aquí espero que te suscribas y me sigas , pues aprenderemos juntos las revelaciones de la palabra de Dios , espero que te guste nuestro sano contenido y que el Espíritu Santo te llene de paz , amor y dicha con nuestros contenidos.


Sin mas me despido y espero que me vuelvas a visitar.



Dios te bendiga.